antes lluvia... cielo de otoño

antes lluvia

Le había dicho a Román que el otoño es mi parte favorita del año, el sol de otoño, el viento de otoño, la indescriptible calma de las lluvias que se fueron, aun así sé que todavía va a llover, porque lo sé porque aquí el verano termina un poco tarde, y está bien que llueva,  está bien ver llover a través de la ventana gris, está bien desear que todo se disuelva en las gotas que caen, está bien muy quedito llorar, está bien esperar sentada en mi sillón, está bien cantar una canción triste, está bien recordar. Está bien querer mi alma regalar, está bien soñar con un toque con el contacto y el calor, está bien soñar está bien, está bien, me repito una y otra vez para ver si me puedo engañar sé que es muy tonto sí, pero también sé que te puedo respirar, cierro los ojos y dejo escapar un suspiro todo lo que he de pasar para llegar a ti, todo lo que has de pasar para llegar a mí, un golpe la casualidad, una canción que te pienso cantar en cuanto te recuestes a mi lado.

bajo la lluvia se puede cantar, se puede llorar, se puede respirar

bajo la lluvia

Cielo de otoño

El verano empieza a ceder las lluvias lavaron mi alma, y los restos de mi muy malsana afición a no creer en algunas cosas, este año llovió mucho, la gotera en mi cuarto mojo algunas cosas nada que no se puede reparar, y la gotera en mi cabeza mojo otras tantas algunas de las cuales dudo que tengan arreglo, sabes esperaba que llegases en medio de la lluvia empapado y con una sonrisa, y que yo te abriera la puerta te secara un poco y te invitara a pasar, pero no paso y no sé qué paso, otro año se nos escurre por la alcantarilla y no nos ponemos de acuerdo para el encuentro, ¿qué tonto no?, el verano aparte de sus lluvia me regalo algunas oportunidades que cayeron del cielo, así solitas sin más ni más, pero sigues sin llegar, y no te reprocho, porque sé que me has hablado en sueños; alzaste una ceja cuando te dije que te quería besar y volviste a sonreír, me miraste un tiempo buscando en mi rostro alguna seña de engaño, y al no encontrarla me besaste yo ahí de puntitas tocaba mis labios con los tuyos, cerraba los ojos y colocaba mi cabeza sobre tu pecho, volvía a llover, el mundo de afuera se disolvía entre tantas gotas de agua, minúsculas suicidad que se entregaban al todo se fundían con él, y yo ahí dentro me fundía contigo, lástima que fueron solo sueños, no dudo que en algún momento reales pero en este instante lejanos… bueno no, no lo sé, hace mucho me dijiste que cultivara en mi la compasión y sabes funciono.